¿Cuánto pagan los servicios de streaming por reproducción?
Se ha hecho especialmente patente durante estos días que la industria musical debe cambiar. La música en directo, que era el sustento principal de los artistas, ha quedado suspendida de manera indefinida y se ha hecho evidente que con la venta de discos (prácticamente nula) y las ganancias obtenidas por las reproducciones en las diferentes plataformas (cantidades por unidad insignificantes) es inviable mantenerse económicamente.
La transparencia respecto a las tarifas que pagan las plataformas de streaming por reproducción es muy limitada y en ocasiones, es incluso, dificultoso encontrar la misma tarifa aplicada a varios artistas. Es cierto que existe un rango de precios en las aplicaciones, pero el extracto final puede variar por cosas como: si la reproducción viene de un usuario premium o uno freemium o dependiendo del país donde se origina el play.
Es por esto que hemos querido poner un poco de luz al respecto: por la relación desigual entre el uso masivo de estas plataformas vs remuneración a los creadores, por la opacidad al respecto y porque es necesario un cambio estructural.
*Los datos que veréis en las imágenes han sido extraídos de thetrichordist.com, estaban originariamente en dólares y han sido convertidos a euro para hacer una aproximación a nuestra moneda.
Estas serían las tarifas adaptadas a euros por play en cada una de las plataformas y sería la tarifa en el caso de que se tuvieran todos los derechos. Si se estuviera en una major, el artista recibiría el 20%.
Si hacemos un cálculo rápido, podemos ver que la cantidad de streams necesaria para conseguir 1€ es exageradamente elevada. Y si llevamos ese cálculo a mayores veríamos que cubrir los gastos de producción, grabación y promoción de un single por este medio puede ser toda una odisea.
No es sorprendente encontrar a las plataformas más populares en los últimos puestos de esta clasificación. A pesar de atesorar las mayores cantidades de usuarios y de inversión publicitaria, los propietarios de los contenidos no se benefician económicamente de estas características.
Por otro lado, Spotify estrenaba el pasado 22 de abril su “Artist Fundraising Pick”, un botón en el perfil de los artistas que permitirá recaudar fondos directamente de los fans. Una herramienta que parece una ayuda pero que vuelve a degradar la posición del artista. Los fans ya apoyan directamente a sus artistas favoritos, por lo que no sería necesario este botón si plataformas como la que está liderando esta iniciativa pagara un precio justo por las reproducciones generadas en sus plataformas.
Cubrir costes es el principio básico para poder mantener económicamente un proyecto, pero la cuestión no es que el artista pueda cubrir costes si no que pueda vivir del trabajo que hace. El salario mínimo interprofesional en España es de 1050€, escoged vuestra plataforma favorita y dividid ese número por el precio unitario por reproducción, eso os dará el número aproximado de plays que necesitaréis para ganar el sueldo mínimo.
En plataformas como VEVO, que se presenta como “The world's largest all-premium music video provide”, necesitaréis 1.500.000 reproducciones para alcanzar el SMI. Cualquiera que haya lanzado alguno de sus temas sabe cómo de difícil es conseguir semejante número y también sabe que 1050€ no llegaría ni a cubrir los gastos totales de lanzar un único tema con videoclip.
En definitiva, es importante que se tome conciencia de lo necesario que es cambiar esto y que los ingresos por la música grabada se reconozcan como necesarios, pues es la pata esencial del trabajo como artista. ¿A cuántos artistas conocemos que para mantener su vida artística deben de tener un trabajo convencional? ¿Por qué están tan idealizados los emprendedores en diferentes áreas y en cambio no pasa lo mismo con los artistas si sus creaciones, en muchas ocasiones, son el sustento y reflejo emocional de la mayoría de personas?